miércoles, 29 de julio de 2015

Perdiendo la cabeza #3

 -despierte señorita
 -WTF, que mierda
 -no creo que ese vocabulario sea el más adecuado
 -mi cabeza, no me grite... ¿donde estoy?
 -esta en donde debería haber estado desde que llego a esta ciudad, mi nombre es Dora
 -¿qué pasó?
 -eso lo sabrá usted, aquí llegó esta mañana en estado bastante deplorable
 -¡oh! que puta, me engañó
 -¿disculpe?
 -no le decía a usted, disculpe, por favor vuelva en unas horas más
 -lo siento, pero soy la encargada de que usted salga a esa cama
a esta hora, es mi trabajo y lo sé hacer
 -ya, entonces sáqueme de esta cama, en mi maleta hay un número de una grúa
 -si tuviera maleta lo buscaría
 -crap, fucking drinks, bueno dígale a su jefe que mis cosas están en un pub de la ciudad y que la necesito para levantarme- ni siquiera le vi el rostro, sólo hable de abajo de las sábanas, no entendía mucho que sucedía, sí sabía donde estaba, pero en cambio sólo continué durmiendo hasta que…
  
 -¿¡Qué pasa!?
 -el agua revive muertos
 -¡no tiene porque tirármela en la cara! ¡loca!
 -su maleta está en camino, por el momento le traigo un buzo de la institución, párese, dúchese y la espero afuera para luego seguir con su primer día
  Que dolor de cabeza y revoltijo de estómago, eran las 8 de la mañana y no recordaba mucho, prácticamente nada de como llegué a este lugar. Estaba en el famoso campamento y Josefa al parecer era una empleada bastante astuta porque me engañó en unos minutos, que desgraciada jugó conmigo y eso no lo permito, menos lo perdono. 
  El lugar era de última tecnología, pero mi pieza era un espacio pequeño en comparación a lo de costumbre, ¿una cama de plaza y media? espero sea una broma. No era como lo había imaginado, tenía mi propio baño, parecía como un hotel, pero pequeño y sin decoración, por lo menos hasta el momento eso parecía, no sé que hay tras la puerta. No podía pensar con claridad ni menos profundizar en lo de anoche, por supuesto habían pasado sólo unas horas y aún estaba ebria.

 -sígame
 -¿no tenía un buzo más feo?
 -es el único diseño que se maneja, se me pidió informarle que ya se habló con su madre y con la directora del centro, no tiene espacio para conversar con usted hoy, pero durante la semana le dará la bienvenida, por el momento le mostraré las instalaciones y le facilitare su horario
  Esta señora parecía mayordomo pero en versión mujer, bien arreglada y peinada con esa cosa que deja el pelo tieso, ni un pelo al aire, de hecho era igual a Morticia pero más baja.
Tenía un horario, me cargan los horarios y más encima todos los días levantarse temprano, mi iPhone no tenía buena señal por lo que no tenía internet y el wi-fi tenía clave. Por lo menos tenía el mp3 que siempre me acompañó a todos lados y nada puede contra él.
Que era eso de meditación, comida 6 veces al día ¿esto es para adelgazar cierto?, ¿se habrán confundido de horario con el de alguna persona con anorexia?, ¿hora de trabajo en grupo?, deportes multiplicado por mil veces en el horario, ¿ni siquiera el sábado descanso?, ¿kinesiólogo, psicólogo, cardiólogo? y ¿una vez al mes exámenes? ah no, una aguja no entrará en mi cuerpo, eso que si no.

 -Valentina ¿cierto?
 -si
 -Hola, soy Claudia soy la tecnóloga encargada de tus exámenes durante tu estadía aquí
 -…
 -bueno, dada la información de tu situación actual sólo puedo hacerte una alcoholemia para ver en cuanto tiempo más tengo que hacer los exámenes
 -disculpa, ¿alcoholemia? ¿qué crees que soy?
 -no creo que seas nada de lo que estas pensando, lo que sé es que anoche bebiste más de la cuenta y tengo que hacer los exámenes lo antes posible, por eso necesito saber con exactitud cuando no tendrás alcohol en tu cuerpo
 -no lo creo
 -no hagas que esto sea complicado, aquí no te vamos a amarrar, pero tarde o temprano tendrás que hacerlo igual, para este examen o para otro, no soy tu enemiga
 -¿por qué simplemente no me haces un alcotest?
 -porque no es fiable ni exacto
 -de acuerdo, sólo hazlo rápido

Si supiera el terror que tengo de mirar las agujas entrar por mi cuerpo probablemente hubiese sido más considerada o me hubiese dado otra opción, pero creo que se dio cuenta, porque por primera vez en mi vida caí desmayada.

 -sin comer, recuperándose de una noche de fiesta, ayer tuvo un día agotador y probablemente tampoco comió bien y ahora le sacan sangre, era obvio que se desmayaría
 -Jo, entiende que igual su cuerpo podía soportar un pinchazo, probablemente le tenía miedo a las agujas o a la sangre
 -¿qué te dijo?
 -me dijo que cómo se me ocurría hacerle un examen así, que qué creía que era y que si quería le hiciera un alcotest, es distinta, tiene algo diferente aparte de su genio
 -hm

Escuchaba mientras trataba decir que quería vomitar. Un real problema para la institución recibir a personas como yo. La verdad es que aunque mi objetivo era causar problemas y romper reglas no me sentía bien, estaba enferma, enferma de borracha.

 -hey Claudia
 -Vale, te desmayaste, tranquila está todo bien
 -ya, pero sabes, necesito pararme
 -aún es muy pronto, quédate en la camilla un rato
 -es que quiero vomitar

Bastó con decir esa frase para que ambas me ayudaran a llegar al baño más cercano y bueno ahí esperaron afuera, o eso creía, cuando de repente sentí una mano en mi espalda, que rayos sucedía acá, esas cosas las hacen tus amigas y acá no tenía amigas, ¿acaso piensan que porque uno esta pagando este maldito centro tienen que ser amigables y acogedores o tenerte pena?.

‘no es necesario’ le dije sollozando y agitando un brazo para que saliera de mi metro cuadrado. Cómo pude tomé papel higiénico para limpiar todo lo que no debía estar en mi cara o en mi nariz, que cosa más asquerosa vomitar, me carga, hasta por la nariz salen cosas y mis ojos no paran de llorar.

 -te daré un medicamento… necesitas hidratarte y comer algo porque…
 -Claudia, es caña, anoche tomé demasiado por idiota, lo único que necesito es descansar mañana o en la tarde ya estaré bien, ¿nunca haz tenido caña?
 -nunca con casi coma etílico
 -gracias, nunca hagas competencia de resistencia
 -de nada, no lo haré, cualquier cosa marcas el numero que sale en el escritorio de tu habitación en el que salga mi nombre, recuerda que soy tu médico
 -ok gracias

Ví sólo la espalda de Josefa cuando hablaba con Claudia, ella vio mi vomito y yo su espalda… me bastaba para odiarla cada vez más, no quiero saber nada de ella, absolutamente nada.
Primer día de cárcel, sólo vi unas cuantas personas afuera, genial, aquí hacemos puros números 10. Que pensará toda esta gente, no creo que este aquí por voluntad, pero es gente que esta enferma, yo no lo estoy, no sé que…

<‘pero muévete más’ me decía mientras bailábamos, era la primera vez que nos veíamos y se sentía bien estar cerca de ella, ‘pero bésame’ me decía insistentemente ‘aún no’ le repetía, hasta que no pude soportar su insistencia y me acerque para besarla…>>

 -Disculpe señorita Valentina
 -dime Vale
 -Vale, le traje comida, soy Marta, trabajo en el casino, coma algo para que se recupere
 -oh muchas gracias
 -de nada, disculpe si la desperté
 -no te preocupes, sólo soñaba estupideces

Cuando vi la comida que trajo Marta y las porciones me reí a carcajadas, era tan diet y mínimo que cualquier persona moriría de hambre, pero como eran muchas porciones al día estaría bien, para mi el problema no es la cantidad de comida, como poco, pero comida chatarra y no tengo tiempo para salir de mi sedentarismo, porque me da flojera salir de él.
  Mientras me reía volvía a la realidad, ¿qué sueño fue ese? la noche había sido dura por lo que mi subconsciente aún daba vueltas en ella y también porque supongo que estoy muy mal enfocada en mi vida, todo ha sido un maldito desastre.
No podía dejar de pensar en mi maldita vida, en donde había llegado, esto es tocar fondo. Maldecir era lo único que tenía en este lugar.

 -ok, creo que ya te mostré todo el establecimiento, ahora sólo debes seguir tu horario
 -gracias Dora
 -le advierto que muchas de las personas, por no decir la mayoría o todos saben que usted llegó ayer, pero se lanzó el rumor que estaba enferma del estómago por el viaje, es el centro de atención por acá en estos días, cuidado con eso puede ser abrumador
 -gracias por ponerme al día Dora, eres un sol

Poco o nada me importaba lo que dijeran o pensaran de mi, pero meditando me di cuenta que tampoco era bueno ser el centro de atención, ya que todo lo que hiciera se sabría y no podría ser yo misma. Así que lo mejor era pasar desapercibida, ¿cómo? no sé.

2 comentarios:

  1. Ok puedo decir que ya me encanta. Gracias por compartir estas cosas en serio me sacas de todo el "estrés" por un rato

    ResponderBorrar