Perdiendo la cabeza #25

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Las semanas pasaban y Josefa me volvía loca, las cosas que decía cada que hablábamos, no sé si estaba aplicando alguna técnica psicológica para que pensara tanto en ella, atrapada en cada pensamiento. A pesar de la tragedia que traía a mi vida el sentirme embobada por una persona diferente a mi, esto sólo provocaba felicidad y dolor de estómago al pensar en volver a verla.

Mi trabajo me hacía la vida más fácil, el disco estaba saliendo tal cual lo habíamos planeado, tan hermoso que a nadie le importaba estar más tiempo del pronosticado. A mi tampoco me importaba pasar más horas o días haciendo lo que daba sentido a mi vida, pero
junto a ese sentimiento estaba el de lejanía hacía la persona que hacía que el sentido de mi vida tuviera más colores y formas.

Amparo se estaba convirtiendo en una gran amiga, compañera y productora. Salíamos cada que podíamos, ya sea en ánimo o tiempo, y sin siquiera pedirlo me llenaba de contactos y buenos consejos para el futuro.

- supe que Al te fue a dejar a tu edificio en la fiesta de hace unas semanas

- ¿qué? - pregunte algo divertida- ¿por qué me hablas de esto? si ¡hablábamos de música!

- curiosidad

- ok… curiosidad de qué

- de que quizás supe que… y no es que tu lo escucharas de mi

- al grano

- habla mucho de ti, en realidad pregunta, es extraño

- no podía decirle que no a una invitación de ir a dejarme gratis en un auto lujoso a mi departamento

- sabes que hay fotos en internet

- si, cuando nos conocimos ella subió una

- no

- si

-no, hablo de las fotos de tu bajándote de su auto y ella dentro despidiéndose 

- que Hollywood la vida de Alice, la cagó, pero querida tu sabes que no voy por ese camino

- sólo lo digo para que tengas cuidado, soy su amiga y por eso la conozco, es muy obstinada 

- gracias, pero no hay de que preocuparse.

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Claro que había, Alice no era como la había leído en las revistas, era peor y con la suerte de mis últimos años o de mi vida en general, algún problema debía haber.

Estábamos comenzando el tercer mes en Madrid, teníamos colaboraciones y quedaba mucho menos de la mitad del disco para volver a Chile. Al menos por un par de meses antes de lanzarlo.

En este tiempo Alice ya no era la amiga de mi amiga en una fiesta en común, no, Alice era ‘mi amiga’ esa amiga que quiere vayas a sus eventos con ella, que la llames, que respondas sus mensajes y que en general seas su pareja. Esa era la definición de amistad para ella.

Di excusas tantas veces que perdí la cuenta y jamás pensé que estaría rechazando las insinuaciones de una gran actriz famosa, hermosa, escultural y simpática, pero demonios que Jo me tenia amarrada con amor. 

El trabajo, estoy cansada, no tengo tiempo, perdón tengo otros planes, ya no me quedaban más justificaciones. Amparo lo advirtió y lo seguía haciendo, sabíamos que Alice sabía que la estaba rechazando, pero no se daría por vencida, después de todo, si yo fuera ella no permitiría que ninguna cantante de país conocido sólo por catástrofes naturales me rechazara y en realidad de ningún país.

Decirle a Josefa lo que estaba pasando sería alarmarla, confío plenamente en lo que siento y jamás podría hacerle algo como engañarla, si ya no siento nada, sólo tendré que decirlo, pero hacerle algo que la marcará y además herirá: no.

Con Amparo comenzamos a recorrer la ciudad y lugares cercanos los días de descanso, la mayoría de nuestros panoramas eran juntas. Teníamos programado un viaje de fin de semana por ciudades marcadas en un mapa que no conocía, no importaba si fueran ciudades aburridas, pequeñas, etc, etc, se entiende, la idea era conocer.

A las 7 de la mañana día Sábado suena el timbre, venía a buscarme.

- ¡hey! será un gran viaje- dijo Amparo al verla tras el umbral de la puerta

- ¡si que lo será!- dijo entusiasmada otra voz apareciendo por el pasillo

- lo siento, me sacó toda la información a la fuerza, no pude evitarlo- susurró

- ¡Alice! que sorpresa ¿nos acompañarás?- pregunté con la nula esperanza de que dijera no

- definitivamente, tengo mi mochila lista, ¿en que viajaremos?

- en buses y tren- que se arrepienta, que lo haga por favor

- ¡genial!

No me gusta ser así con las personas, pero Alice se merecía mi maldad, lo hacía a propósito sabiendo que, ósea no, quizás en otra vida.

- Ok, ¿por donde comenzamos?

- aquí tienes un mapa, puedes guiarnos- le dije

- se exactamente como leerlo, pero no sé que locomoción tomar

- entonces nos guiará Amparo   

Apenas nos subimos al primer tramo de viaje en tren ya teníamos a un grupo de gente pidiendo alguna foto o no sé, cualquier cosa, la idea del viaje era despejarse, ser una más del resto y Alice no ayudaba.

Entendía perfectamente lo aburrido y cansador que debe ser para ella llevar esa vida, así que había que ayudarla

- listo, nada que una buena peluca y lentes de sol no puedan arreglar

- gracias Vale, lo siento si las incomodé

- ay por favor Al- exclamó Amparo- deja de tratar de conquistarla

Y ese fue el momento en que mi color de piel no era exactamente blanco, era algo así como rojo… intenso y calor, mucho calor

- Amparo te voy a matar- le respondió

- atrápame y veamos 

En ese momento salieron corriendo, lo que me dio tiempo de respirar, algo que creo olvidé.

Luego de volver a juntarnos sólo reímos, todas sabíamos lo que pasaba y cual se hacía más la desentendida. Por lo menos Alice no lo tomaba tan en serio y eso tranquiliza.

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Faltaban detalles para terminar las grabaciones y los pasajes estaban listos para volver a Chile, luego debía regresar a España pero sólo por unas semanas, moría de ganas de ver a Josefa, en realidad de sentirla, la veía a diario, pero por supuesto no es lo mismo.

Con Amparo programamos una fiesta para el equipo, todos trabajamos muy duro y merecíamos un presente o fiesta de despedida, como quieran llamarlo.

Amparo hizo un par de llamadas y listo, tenemos fiesta.

- ¿que tal todo por España?

- todo perfecto linda ¡ya no queda nada para vernos! estoy demasiado emocionada, hasta tengo ganas de gritar

- ¡yo igual! pedí unos días libres para la fecha en que vuelves, así podemos tener todo el tiempo para nosotras

- me encanta la idea

- ¿ya tienes fecha exacta?

- si, me voy en 6 días, acá ya esta todo casi listo, tendremos una fiesta de despedida y hello Chile

- soportamos tanto, ya no queda nada

- así es amor

- te extraño

- yo también, mucho

- Vale… vi algo en internet que… no sé, me causa ruido

- ya sé que es, no tienes que preocuparte esta todo controlado

- ¿está todo bien?

- si, es sólo que Alice…

- Alice… continúa

- nada, Alice es difícil de manejar, tu sabes, es una estrella bastante conocida

- entiendo, pero leí que las habían visto juntas en varios lugares y hay fotos de un viaje

- inventan muchas cosas en internet Jo, deberías saberlo

- lo sé, pero necesitaba estar segura, confío en ti por eso pregunto- no le había dicho nada a Jo sobre Alice y su obsesión conmigo, sólo la preocuparía, pero ahora que preguntaba no podía mentirle

- no quería preocuparte, te amo lo sabes… Alice está algo interesada en mi, es extraño, es obsesiva, quizás deberías hacerle un diagnóstico- dije con algo de risa para calmar las cosas

- no es gracioso

- hey… confía en mi

- lo hago, en ella no

- quedan pocos días para volver y la única persona que está en mi cabeza eres tu, ni Cara Delevingne podría sacarte… aunque igual un trío con Cara no estaría mal

- ja ja

- admite que lo disfrutarías

- no tanto como tu

- pero lo importante es disfrutar

Pasaron los días, las grabaciones estaban listas, sólo quedaba la fiesta y el día del viaje vuelta a casa, extrañaría demasiado a Amparo y mis nuevos amigos, pero no era una despedida, volvería.

Estaba en mi pieza cuando me llama Josefa, conservando la calma me dice

- no son celos, es rabia de que ella tome tu vida y la mezcle con la de ella haciendo parecer que son más que amigas

- hola, bien ¿y tu?

- no bromeo

- ¿de qué me perdí?

- sólo en las noches tengo tiempo libre para distraerme y lo primero que veo es una entrevista de Alice donde le preguntan por ti, ella sólo se ríe y no desmiente nada, ¿puedes explicarme eso por favor? estoy bastante calmada en este momento, pero si la tuviera en frente te juro que a la mierda todo lo que he aprendido, yo la mato

- ok… calma, ni siquiera he visto esto de lo que hablas, mándame el link y lo arreglaré, te dije que estaba algo obsesionada, ¿qué puedo hacer en este caso? tu eres la psicóloga clínica, no tengo idea de que otra forma decirle no

- tienes que alejarte de ella

- lo hago… siempre, pero aparece igual

- Valentina, ten cuidado, si es una obsesión contigo no te dejará tranquila

- no lo ha hecho, pero lo hemos manejado bien hasta ahora, no queda nada para dejar el país, no dejare que arruine todo lo bueno que ha pasado hasta ahora, es sólo una chica caprichosa que siempre ha tenido lo que quiere

- sólo cuídate 

- es lo que hago… no la hagas importante, no lo es

- esta bien, vuelve pronto

- sólo tres días más

- disfruta la fiesta

Alice no podía ser un tema en mi relación amorosa, no debía serlo porque ni siquiera sentía atracción por ella. Amparo tocó el timbre y nos fuimos a la fiesta… en la que claro: Alice esperaba.